martes, 4 de noviembre de 2014

LECTURA POÉTICA

El Viernes 31 de octubre de este año de 2014 nos visitó ANTONIO CALZADO ARIAS, poeta, pintor y escultor de Hervás y hombre bohemio y, al mismo tiempo, de una gran sencillez. Mi agradecimiento por haber aceptado la invitacion que le cursé para venir al Pérez Comendador a desarrollar una clase de poesía a mis alumnos. Los alumnos a los que se dirigió son del último curso del ciclo de Diversificación en su Ámbito Sociolingüístico. 

A los alumnos y a mí mismo nos sorprendió la manera vehemente y apasionada con que ANTONIO CALZADO recita(yo diría que vive)sus poemas. Por encima de su perfección formal, nos llegó profundamente esta manera de decir sus poemas, llena de fuerza y con un gran poder de transmisión de sentimientos y sensaciones. 

En último término, el mérito de ANTONIO CALZADO es mayor porque, como ya le sucediera al gran MIGUEL HERNÁNDEZ, se trata de un hombre hecho a sí mismo, sin formación académica ni universitaria, un perfecto autodidacta. Desde muy joven quiso dar rienda suelta a sus potencialidades creativas, haciendo suya la máxima de PÍNDARO cuando decía: "Conviértete en quien eres". "La vida de un hombre no vale nada si no vive de acuerdo con su conciencia", decía GARY COOPER a DOROTHY McGUIRE, su mujer en la película La gran prueba, de WILLY WILDER, que narra la oposición a la guerra de Secesión americana por parte de una familia de cuáqueros. Pues bien, me temo que CALZADO ARIAS ha vivido de acuerdo con su conciencia y gracias a ello nos ha podido ofrecer su obra, llena de sencillez y autenticidad. Me resultaron muy emotivas las palabras que dirigió a los alumnos alertándoles de la importancia que tiene el aprendizaje reglado u oficial, pues evita los tropiezos y sinsabores del aprendizaje  autónomo o autodidacta. El aprendizaje puede hacerse por la vía oficial o particularmente. CALZADO ARIAS optó(tal vez, obligado a ello) por la segunda opción. Pero él no descartó la primera vía, la oficial o reglada, sino que animó a los alumnos a que estudiaran y tuvieran siempre afán por aprender. Esto es lo importante. 

Muy agradecido también por la donación que CALZADO ARIAS hizo de algunos ejemplares de sus libros para la Biblioteca del Centro.